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Los niños de la Guajira que lloran, no botan lágrima´´
La desnutrición en La Guajira está reinando
en estos días ya que por la grave falta
de alimento y sobre todo la falta de agua, los niños se están muriendo. Según los noticieros, la chicha puede ser su único alimento, y la
lluvia, su agua. Se desconoce cuántos
niños wayuu han muerto hasta hoy.
Pálidos
son sus cabellos, no se sabe si son amarillos o rojizos, es escaso porque se les cae, algunos
presentan llagas en su cuello y peladuras
en sus partes dentales. Sus miradas son bastante opacas, el abdomen
bastante dilatado, las piernas son flaquitas, se les pueden observar su
costillas, algunos tienen dos años y no caminan, esta es la radiografíe de los
niños wayuu.
Una
mujer que conoce hace más de cuarenta años a los wayuu, y que pide ser no
identificada, narra como el hambre mata a los niños indígenas de La Guajira.
!Este niño se está muriendo! ¿Por qué no lo han llevado
al hospital?
Ven,
vamos. ¡Vamos a llevarlo!
-dijo ella al ver a un pequeño acostado en una hamaca, orinado
-No,
no déjelo ahí. Déjelo que se muera le responde el padre del niño.
-oye,
pero ¿Cómo vas hacer tu eso?
-No,
no déjelo ahí. No se lo vaya a llevar, porque si el niño se muere en sus manos,
usted lo paga. Le advirtió el hombre.
La
impotencia se apodera de la mujer.
Ella
revela que en algunos casos, la autoridad indígena impide que el niño que
´´corre peligro de morir´´ sea salvado en un centro de salud. Para los wayuu,
un niño enfermo implica mucho gasto y es mejor que los dioses se lo lleven. Según
la defensoría, en La Guajira, hay por lo menos 37.000 niños desnutridos.
A
pesar que las autoridades ambientales han alertado sobre la inminente presencia
del fenómeno del niño, el drama en diferentes regiones del país muestra que
pocos están preparados, lo que implica que esta escena de niños muriendo, se va
a repetir en varios lugares de Colombia si el gobierno no hace algo para ayudarlos.